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¿Por qué es mejor la orientación a contramarcha? La mayor ventaja de una silla de auto orientada hacia atrás es la mayor protección que ofrece a la cabeza, el cuello y la columna vertebral del niño en caso de colisión. La estructura de la silla orientada hacia atrás abraza al niño y distribuye las fuerzas del choque sobre una superficie mayor, por lo que reduce significativamente las fuerzas que actúan sobre el cuello.
En caso de colisión, las probabilidades de sobrevivir o evitar lesiones graves aumentan considerablemente si el niño viaja en una silla orientada en sentido contrario a la marcha en lugar de en una orientada a favor de la marcha. Los asientos orientados hacia atrás son más seguros porque la cabeza de un niño es desproporcionada en relación con el cuerpo y representa hasta el 25% del peso corporal total, mientras que en un adulto la cabeza sólo representa el 6% del peso corporal total. Al mismo tiempo, el cuello del niño es muy vulnerable, ya que no está completamente desarrollado todavía. La sensibilidad del cuello, unida al peso de la cabeza, hace que sea aún más importante proteger y sostener el cuello del niño el mayor tiempo posible.
¿Hasta qué punto es más segura la orientación hacia atrás que la orientación hacia delante? Las pruebas de colisión frontal demuestran que las fuerzas que actúan sobre el cuello son hasta cinco veces mayores cuando el niño va sentado en sentido a favor de la marcha que cuando va sentado en sentido contrario la marcha. Esto significa que viajar en un asiento orientado hacia atrás puede ser hasta cinco veces más seguro para tu hijo.
El movimiento dinámico del cuerpo del niño es muy diferente según el sentido de la marcha en caso de impacto. Durante un impacto en una silla orientada hacia delante, el cuerpo es empujado fuera de la silla y sólo el arnés o el cinturón lo mantiene en su sitio, pero la cabeza sigue queriendo moverse hacia delante. Esto provoca que las fuerzas del impacto se transfieran al cuello del niño, creando una enorme tensión en el cuello.
La mayor ventaja de las sillas orientadas hacia atrás es que sujetan toda la espalda, el cuello y la cabeza del niño, distribuyendo las fuerzas del choque sobre una superficie mayor y, por tanto, reduciendo significativamente las fuerzas impuestas sobre el cuello. Por tanto, una silla de auto orientada hacia atrás ofrece al niño una mayor protección y reduce el riesgo de lesiones graves en caso de colisión, y por eso las sillas de auto orientadas a contramarcha son más seguras.
¿Cuánto tiempo puede estar un niño en un asiento orientado hacia atrás?
Las recomendaciones generales dicen que los niños deben ir en sentido contrario a la marcha hasta una edad mínima de 4 años, nuestro objetivo en Axkid es que vayan en sentido contrario a la marcha hasta los 6-7 años, por su propia seguridad.
Aunque algunos padres pueden tener la tentación de orientar la silla de su hijo hacia delante antes de la edad recomendada, es importante conocer los riesgos. Las sillas orientadas hacia delante no ofrecen el mismo nivel de protección que las orientadas hacia atrás, y los niños que las orientan prematuramente hacia delante corren un mayor riesgo de sufrir lesiones en caso de accidente.
FUENTE: AXKID